El mal está cada día más presente en nuestras vidas. El mundo está tan violento, son tantas las atrocidades que vemos en los noticieros, que algunas no podemos creer. Si Dios es un padre amoroso que ha dado su vida para salvar a los pecadores, ¿cómo pueden existir tantas cosas malas en el mundo? ¿Cómo es posible tantas enfermedades, sufrimiento, muerte, violencia, terrorismo, robos y asesinatos fríos que ocurren todos los días? ¿Dónde empezó el mal? Dios es el responsable de todo esto?
El origen del mal
Cuando leemos sobre la historia de la creación en Génesis 1, vemos que todo lo que Dios creó era muy bueno. El relato bíblico deja claro que todas las obras salieron perfectas de las manos de Dios. Sin embargo, un cierto día, antes de la creación del mundo se halló iniquidad en una de sus criaturas.
“Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad.” Ezequiel 28:15. Este verso está describiendo a Lucifer, ex líder de los ángeles, hoy más conocido como Satanás. La Biblia relata que Lucifer era un ángel guardián que tenía libre acceso al monte santo de Dios. Lucifer era un querubín perfecto hasta que su corazón se llenó de orgullo, a causa de su belleza.
En Ezequiel 28: 16-17 dice, “A causa de la multitud de tus contrataciones fuiste lleno de iniquidad, y pecaste; por lo que yo te eché del monte de Dios, y te arrojé de entre las piedras del fuego, oh querubín protector. Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura, corrompiste tu sabiduría a causa de tu esplendor; yo te arrojaré por tierra; delante de los reyes te pondré para que miren en ti”.
Así, Lucifer se rebeló contra Dios y pasó a llamarse Satanás. Engañó 1/3 de los ángeles y llevó el hombre al pecado. Él es el responsable de todo mal que existe. Por lo tanto, Dios no puede ser visto como el originador del mal, pues todo lo que Él hizo es perfecto.
La rebeldía de un ángel
Lúcifer deseaba asentarse en el trono de Dios, pretendía ser semejante al Altísimo. Lo que más quería era ocupar el lugar de Dios y ser adorado igual a Él. Y el resultado de toda la rebeldía fue una gran pelea en el cielo entre Cristo y Lucifer. Apocalipsis 12:7-9 dice que “hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón; y luchaban el dragón y sus ángeles; pero no prevalecieron, ni se halló ya lugar para ellos en el cielo.Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él”.
En ese conflicto, la tercera parte de los ángeles se unió al enemigo, y todos fueron arrojados a la tierra. Dios podría haberlo destruido inmediatamente. Apagado de la mente de los ángeles la figura de Lucifer, pero Él es fiel y justo. Creó los seres libres, para que lo sirvan por amor. Por lo tanto NUNCA usará la fuerza para alcanzar este objetivo como Lucifer lo ha hecho.
El gran engañador
Satanás engañó a los ángeles en el cielo, engañó a Adán y Eva y nos engaña hasta hoy. En el libro de 2 Corintios 11: 14-15 está escrito, ” Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.“.
Él se transforma en ángel de luz, realizando señales y prodigios. Debemos estar siempre atentos con respecto a ese asunto, “porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos.”. Mateo 24:24
Satanás está lleno de ira, porque él sabe que poco tiempo le queda. Según Apocalipsis 12:17, él está enojado contra los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo. Con la ayuda de Cristo podemos luchar contra el gran engañador. Efesios 6:10-18 nos aconseja revertirnos de toda la armadura de Dios. Teniendo el escudo de la fe, siguiendo la palabra de Dios y orando en todo tiempo.
Dios podría gobernar el universo con mano de fierro y nunca sería amenazado, pues igual a Él no existe otro. O quizá, podría haber cambiado la mente de Lucifer habiendo hecho que cambiar de idea y seguir obediente. Pero, decidió crear seres a su imagen y semejanza, con poder de elección, y siempre va a respetarlas aun sabiendo el fin de ellas.
